Siento decir que este microcuento ya lo escribió otro. La carta, de Luis Mateo Díez. http://elcajondesastre.blogcindario.com/2006/11/00941-la-carta-luis-mateo-diez-micro-relato.html
Tienes razón (y no). Desconocía ese microrelato de Luis Mateo Díaz -no recuerdo haberlo leído nunca- pero ciertamente la historia es la misma, aunque el punto de vista sea completamente diferente. Estoy aturdido, es una sensación extraña...
Le he estado dando vueltas al asunto estos días. Podría ser que hubiera leído el cuento de Luis Mateo Díez y no lo recordara y que se quedara escondido en algún rincón de mi memoria. Pero lo cierto es que la gestación de 'mi' cuento parece desdecir esa hipótesis (en principio, la historia era de un suicida que, cayendo desde un viaducto, le pasaba su vida ante los ojos como en una película y moría feliz. Eso me llevó a pensar que pueden ser muchos los motivos para suicidarse, tantos, que si uno los escribiera, tardaría muchos, muchos años. Fue así como llegué a la versión definitiva.) No creo que se trate de un recuerdo inconsciente (aunque tampoco lo descarto; mi mente me juega a veces malas pasadas...). Lo he comentado con algunos amigos, y muchos creen que la historia tampoco es tan extraña como para descartar que dos personas se la imaginen por su cuenta. Es cierto. Quizás la teoria memética de Dawkins podría explicarlo, pero la desconozco (es coña). Bueno, no sé, la verdad es que me gustaría comentarlo con Luis Mateo Díez, pero no creo que eso sea algo a mi alcance...
Siento decir que este microcuento ya lo escribió otro. La carta, de Luis Mateo Díez. http://elcajondesastre.blogcindario.com/2006/11/00941-la-carta-luis-mateo-diez-micro-relato.html
ResponderEliminarTienes razón (y no). Desconocía ese microrelato de Luis Mateo Díaz -no recuerdo haberlo leído nunca- pero ciertamente la historia es la misma, aunque el punto de vista sea completamente diferente. Estoy aturdido, es una sensación extraña...
ResponderEliminarLe he estado dando vueltas al asunto estos días. Podría ser que hubiera leído el cuento de Luis Mateo Díez y no lo recordara y que se quedara escondido en algún rincón de mi memoria. Pero lo cierto es que la gestación de 'mi' cuento parece desdecir esa hipótesis (en principio, la historia era de un suicida que, cayendo desde un viaducto, le pasaba su vida ante los ojos como en una película y moría feliz. Eso me llevó a pensar que pueden ser muchos los motivos para suicidarse, tantos, que si uno los escribiera, tardaría muchos, muchos años. Fue así como llegué a la versión definitiva.) No creo que se trate de un recuerdo inconsciente (aunque tampoco lo descarto; mi mente me juega a veces malas pasadas...).
ResponderEliminarLo he comentado con algunos amigos, y muchos creen que la historia tampoco es tan extraña como para descartar que dos personas se la imaginen por su cuenta. Es cierto.
Quizás la teoria memética de Dawkins podría explicarlo, pero la desconozco (es coña).
Bueno, no sé, la verdad es que me gustaría comentarlo con Luis Mateo Díez, pero no creo que eso sea algo a mi alcance...